lunes, 11 de abril de 2011

¿Dónde está mi pingüino? Oh, es la canción de los pingüinos. Sí, me recuerda a los pingüinos.

Primeros rayos de sol del viaje. Yendo de Milton a Dunedin


Dunedin es una de las ciudades más grandes de Nueva Zelanda (lo cual no es decir mucho). Tiene edificios viejos para lo que es la arquitectura del país. Es una linda ciudad y el día estaba soleado (por primera vez en el viaje). Caminamos un poco, fuimos a la biblioteca y caminamos un poco más.

Una plaza en Dunedin

Estación de trenes.

Florie, la reina de los jardines chinos.


Dejamos la ciudad de Dunedin y fuimos a la Península de Otago (en las afueras de Dunedin). Viajamos bordeando la península hasta Allan Beach, donde caminamos un poco y vimos 3 lobos marinos, pero ningún pingüino.


Lobito

Nosotras en Allan Beach

Road Trip ohhhhh yeah!!

Atardecer


Cuando ya oscurecía fuimos a la casa de René y Marcus, nuestros couchsrufers. René es neozelandesa, enfermera y el año pasado estuvo en Argentina y en Perú. No paraba de decirme lo mucho que le había gustado Buenos Aires. Marcus es alemán y restaura estatuas (o al menos eso es lo que entendí). Su casa está en la pnínsula con una vista hermosa, es toda de madera. Tienen 2 gatos y están por tener un bebé.

Cena en lo de René Y Marcus

Massimo


A la mañana luego de recargar enegrías fuimos otra vez a pasear un poco por la península y dejamos Dunedin para dirigirnos a Oamaru. Paramos a almorzar en una "sheep farm" y por primera vez hicimos un concierto de armónica y melódica para todo el público presente (o sea nosotras dos y unos que almorzaban un poco más lejos... ni las ovejas quisieron escucharnos)

Almuerzo con vista privilegiada
Concierto para las masas


Seguimos camino y paramos en Shag Point a ver focas pero esta vez en colonia.

(No se qué pasó con las lindas fotos de las foquitas, así que por el momento imagínenselas, luego se las muestro en persona. Por favor sepan disculpar las molestias ocacionadas. Atte: La administradora del blog, o sea yo.)

Un poco más lejos y acercándonos a Oamaru paramos en Moeraki a ver las rocas redonditas tan famosas (Boulders). Lo más cómico es que hay una empresa que comercializa las visitas a estar rocas, y hay gente que paga por ver estas esferas, pero si uno camina unas dos cuadras y entra por otro costadito, es gratis.

La redondez hecha rocas

Eran redonditas nomás!

Jugando


Ya oscurecía lentamente y llegamos a Oamaru, donde ¡por fin vimos pingüinos! Emm... perdón 1 pingüino... Pero muy lindo eh!! Se llaman "blue penguins" porque tienen las puntas de las plumas azules. Este era bastante juguetón, entraba y salía de la reja.

Y vimos el pingüino!

A ver como dice mamá!

Era lindo EL pingüino


Primero estábamos emocionadas por haber visto un pingüino, pero después de un rato dejó de ser novedad.


Ya estábamos medio hartas del pingu


Pensamos dormir en Oamaru, pero dimos varias vueltas y no encontramos ningún lugar propicio. Decidimos salir y ver en el camino algún pueblito que nos invitara a dormir en alguna de sus calles.Encontramos el lugar perfecto: Papakaio (que en Maorí significa "el medio de la nada" y realmente lo era). A la mañana desayunamos en la bella Papakaio y seguimos viaje.

Amanecer en Papakaio

Tengan cuidado que viene Florie recién despierta!


Seguimos camino hacia Mt. Cook y paramos a almorzar en el lago Pukaki. Nos acercábamos a las montañas y aparecía nieve y más nieve (aunque aún es el principio del otoño.)

Almuerzo en el lago Pukaki

Por la carretera

Unas amigas que vinieron a saludar


Pasamos por Tasman Lake a ver unos témpanos que se desprendieron recientemente de un glaciar cercano por la cantidad de lluvia. Y seguimos camino. Finalmente llegamos a Mt.Cook, cubierto de nieve en el pico.

Nosotras y los témpanos

Los témpanos desprendidos

El monte cocinero (Mt. Cook)

Flo y el monte


Dormimos en el auto, nos bañamos de garrón en el hostel del pueblo, y desayunamos con mermelada y miel que Florie sacó del hotel donde trabajaba. Se podría decir que nuestras vacaciones son un tanto gasoleras... Las rutas por las que estamos viajando son una más linda que la otra. Los paisajes son impresionantes, llenos de árboles amarillos que se mezclan con el verde y azul de los lagos y el marrón grisáceo de las montañas. Este país está invitándonos a recorrerlo, y eso es lo que estamos haciendo. Disfrutar, solo disfrutar.

DISFRUTAR!

Solo DISFRUTAR

2 comentarios:

Unknown dijo...

Increíble los paisajes, increíble EL pingüino y tb icreible las famosas rocas!!!! Yo quiero amiga!!! y te quiero mucho a vos!!!

madu dijo...

Coincido con Lau!! Increíble!!! La foto de la carretera es genial, parece que estás ahí!!